Crema de puerros y patata con galleta crujiente de parmesano
Justo el domingo que preparé esta receta, en un suplemento dominical aparecían varias maneras de comer la verdura en forma de crema. Cuando compré el periódico, mi crema estaba en espera de pasar por la sesión de fotos por lo que me agradó mucho ver cómo las recetas de cremas son cada vez más numerosas y atrevidas. La mezcla de brécol, coliflor, calabaza, guisantes, etc., con patatas y un buen caldo que ayude a emulsionar todo, tiene cada vez más adeptos aunque es verdad que todavía para algunos no es un plato favorito. Son platos muy amables, delicados pero nutritivos y sabrosos y sobre todo ofrecen la oportunidad de degustar verduras que por sí mismas no gustan mucho.
La calabaza, el calabacín, la patata y el puerro aportan sabores más suaves que el brécol, el guisante o la coliflor que teniendo sabores más fuertes, dan un gusto muy rico que merece la pena probar.
Precisamente por ser ingredientes de sabor suave los que componen este plato, he decidido adornarlo con una galleta de parmesano. Este queso aporta un intenso sabor aparte de realzar en la fotografía la imagen de una sencilla crema.
Os animo a probar sabores de verduras en forma de crema. Son muy agradables para estos días de frío.
Ahí va la receta.
INGREDIENTES
Para 4 personas.
- 1-2 patatas medianas
- 350 g. de puerros
- 1 cebolla
- 50 g. de aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Un vaso de caldo de pollo (preferiblemente casero)
- Un chorrito de nata (opcional)
Para el crujiente de parmesano:
- Queso parmesano rallado
PREPARACIÓN
Lavar bien los puerros bajo el chorro de agua fría; aprovechar solamente la parte blanca. Pelar las patatas, cortarlas en trozos y picar la cebolla.
Poner en una cazuela el aceite y calentar; echar la cebolla y el puerro cortado en aros y rehogar 5 minutos. Añadir los trozos de patatas y rehogar todo junto otros 5 minutos.
Calentar el caldo en el microondas.
Cubrir las verduras con el caldo y dejar cocer hasta que las patatas estén blanditas.
Salpimentar y retirar del fuego.
Cuando se haya templado un poco la mezcla, triturarlo todo con batidora o robot. Cuanta más velocidad, más suave quedará la crema.
Probar y ver si la textura es la que deseamos. En este momento se puede añadir si se desea un chorrito de nata líquida, se remueve bien y se prueba de nuevo el punto de sal.
Para hacer la galleta crujiente de queso utilizaremos una sartén antiadherente; se pone la sartén a calentar y cuando esté caliente se echa un montoncito del parmesano rallado. Al principio, empezará a fundirse, hay que bajar el fuego (entre 1 y 9 poner al 3) y esperar a que se vaya tostando; cuando coge color, está hecha y debe despegarse perfectamente con la ayuda de una espátula plana.
Para hacer la primera galleta, es mejor echar el queso con la ayuda de una cuchara de postre. Se echan como tres cucharadas y se extiende un poco, dando forma circular imperfecta, no tiene que ser un círculo perfectamente redondo. Una vez hecha la primera, haremos las siguientes sin problema dándonos cuenta así de la cantidad y del tiempo que tarda en hacerse. También puede hacerse en el horno, pero si son pocas no merece la pena encenderlo.
Servir la crema caliente adornada por la galleta crujiente de queso parmesano.
Más cosas
Esta crema se puede dejar en la nevera y tomarla fría. Sería una vichyssoise.
El caldo se puede sustituir por leche o por agua. A mí me parece que el agua sola no aporta nada, le va mejor un buen caldo.
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